Mesa 3. Miradas Externas: El Programa IxM desde la Academia y la comunidad científica
Por Miguel Alejandro González Ledesma (IISUE-UNAM)
Agradezco la invitación del Senador José Antonio Martín del Campo a participar en este Foro. Asimismo, agradezco al Dr. Edgar Guerra, Investigador por México y miembro del Sindicato Independiente de Trabajadoras y Trabajadores de Investigación de Cátedras (Siintracatedras) por sus buenos oficios para la organización de esta mesa.
Estoy convencido de que el Foro: Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación para la Transformación de México es una iniciativa de suma importancia para el futuro de nuestro Sistema Nacional de Investigación, especialmente frente al complejo panorama internacional producto de las políticas arancelarias y de hostilidad hacia las personas migrantes, que han marcado la agenda económica y política internacional tras la llegada de Donald Trump a la Presidencia de los Estados Unidos, en enero de este año.
Se trata de una situación que es particularmente grave para nuestro país, debido a los profundos lazos de dependencia económica que nos unen a nuestro vecino del norte. En los últimos meses, los amagos de imponer aranceles a las exportaciones mexicanas han creado un ambiente de incertidumbre que está teniendo un impacto negativo en la estabilidad de las inversiones y en el empleo; al tiempo que la hostilidad hacia las comunidades migrantes en los Estados Unidos ha creado un clima de persecución y acoso que afecta gravemente a nuestros connacionales en ese país. Como sabemos, aproximadamente 80 por ciento de nuestras exportaciones tienen al mercado estadounidense como destino, al tiempo que las remesas de los migrantes mexicanos representan aproximadamente 4% de nuestro producto interno bruto (PIB) (Caro, 2024). Por otra parte, en el año 2021, 72.5% de los productos alimentarios importados por nuestro país provenían de los Estados Unidos. De ese total destaca la compra de grandes cantidades de maíz, y otros granos estratégicos para cubrir la demanda interna (poco más de 15 millones de toneladas) (Zurita, 2022).
En respuesta a los amagos de la administración Trump, el gobierno de la Dra. Claudia Sheinbaum ha tomado una serie de medidas, tales como reforzar el control fronterizo con miles
de elementos de la Guardia Nacional para contener los flujos migratorios, así como acelerar la lucha contra los cárteles de la droga –incluyendo la entrega de decenas de criminales a la justicia estadounidense, y la implementación de operativos de alto impacto para frenar el trasiego de fentanilo y otras drogas. Además, como parte de la respuesta a esta coyuntura adversa, el gobierno impulsa el, así llamado, Plan México, un programa que plantea atraer inversiones, fortalecer la industria nacional, impulsar la innovación y conquistar la soberanía alimentaria (Cano y Cernichiaro, 2025; SADER, 2025).
Aunque la respuesta mexicana se ha revelado efectiva en el corto plazo, es clara la urgencia de replantear la estrategia económica nacional hacia el futuro. La dependencia excesiva de un sólo mercado entraña riesgos considerables, por lo que diversificar las exportaciones hacia otros países y agregar valor a la producción interna se presenta como una necesidad estratégica para nuestro país.
Atendiendo a la convocatoria de esta mesa, quiero colocar el acento en la grave desatención al sector humanístico, científico y tecnológico a la luz de los enormes desafíos que estamos enfrentando. Lo hago con la convicción de que el rezago histórico que arrastramos en la materia impacta negativamente en el desarrollo de México, y resta viabilidad a un proyecto de gran calado como el que se pretende llevar a cabo con el Plan México.
El diagnóstico elaborado por el Siintracatedras, luego de un enorme esfuerzo de investigación y análisis de la problemática que enfrentan las poco más de mil personas que forman parte del programa Investigadoras e Investigadores por México (IxM), ilustra, desde la experiencia de este colectivo, algunos de los problemas que padecen las y los trabajadores de la ciencia en nuestro país. Al mismo tiempo, da cuenta del actual vaciamiento de una política pública (las otrora “Cátedras Conacyt”), implementada con la intención de impulsar un modelo de desarrollo científico donde el Estado juega un papel activo en la contratación y ubicación de personas investigadoras en instituciones académicas y centros de investigación, bajo una lógica similar a la que se ha seguido en Argentina a través del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).
El estudio se centra en los ámbitos laboral, académico y administrativo. En lo laboral, entre otros problemas, destaca la inestabilidad contractual, la falta de respaldo institucional frente a prácticas injustas en las instituciones receptoras, y la exposición del personal a formas de violencia laboral. Esta problemática tiene su correlato en otras formas de precarización como, por ejemplo, las que padecen los miembros del SNII que laboran en condiciones de precariedad en IES públicas. La eliminación, en 2020, del requisito de las 40 horas como condición para recibir el estímulo económico asociado al nombramiento, benefició sin duda a
muchas y muchos colegas. Sin embargo, en la práctica, reprodujo condiciones similares a las denunciadas por el personal IxM y operó como un subsidio indirecto a las instituciones de educación superior que dependen del trabajo precario de su personal académico para cumplir con sus funciones de docencia.
En cuanto a las dimensiones académica y administrativa, destaca la subordinación de la primera frente a la segunda, manifestada en evaluaciones punitivas y poco contextualizadas, así como la falta de acceso a recursos básicos como infraestructura y espacios de investigación. También persisten desigualdades con respecto al personal de las instituciones receptoras, así como dificultades para publicar y difundir resultados. Situaciones como esta son padecidas igualmente por integrantes del SNII con contratos precarios, lo mismo que beneficiarios de los diferentes programas de becas posdoctorales. En general, y contrariamente a lo que se afirma en el discurso oficial, los instrumentos de evaluación y administración del quehacer científico continúan anclados al paradigma neoliberal de la Nueva Gestión Pública (NGP), con sus métricas, recompensas y sanciones asociadas a una visión reduccionista, individualizante y excluyente del mérito y de la producción académica (Vera y González, 2018).1
Frente a esta problemática, Siintracatedras propone una serie de propuestas agrupadas en tres grandes rubros: estabilidad y derechos laborales; fortalecimiento académico y eficiencia administrativa. El diagnóstico y las propuestas me parecen sumamente pertinentes para informar la discusión que habrá de llevarse a cabo con la finalidad de reformar la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencia, Tecnología e Innovación (HCTI), luego de que en la presente administración se elevara al Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías al rango de Secretaría de Estado. Se trata de una coyuntura relevante porque permitiría ampliar los alcances de la Ley y, sobre todo, corregir una serie de problemas en la versión que entró en vigor, tras su aprobación en ambas Cámaras, en mayo de 2023 (SECITHTI, s/f).
La Ley, vale la pena recordarlo, se aprobó a pesar de las numerosas críticas expresadas por integrantes de la comunidad científica, y sin que se agotaran las sesiones de parlamento abierto que estaban programadas para su discusión (Proceso, 2023). Entre los aspectos más polémicos, y que valdría la pena replantear, destaca la renuncia al objetivo de alcanzar el 1% del PIB en recursos destinados al sector, una meta establecida por la UNESCO como referencia mínima, que si bien insuficiente, constituye la base sobre la cual es posible conformar sistemas nacionales de innovación (Dill y Van Vaught, 2010; UNESCO, 2015). Otro aspecto
controvertido es la supeditación del quehacer humanístico, científico y tecnológico a la agenda sectorial del gobierno en turno, lo que conlleva una centralización excesiva en detrimento de una política científica de Estado. En cuando a la administración del sector, la Ley fue calificada de “centralista y vertical”, debido a la creación de una Junta de Gobierno conformada por las secretarías de Estado, y con una participación testimonial de las IES, centros de investigación y, en general, de las comunidades científicas del país (Lagos, 2023).
En este tenor, resulta evidente la necesidad de abrir la discusión sobre el Programa Investigadoras e Investigadores por México. Esta revisión debe orientarse, por un lado, a corregir una serie de injusticias que han afectado al colectivo que lo integra en los ámbitos laboral, académico y administrativo. Pero, sobre todo, debe tener como horizonte el restablecimiento y la ampliación de sus objetivos originales, con el propósito de que el programa se consolide como parte de una política de Estado orientada a potenciar las capacidades humanísticas, científicas y tecnológicas del país. Sólo así estaremos en mejores condiciones para enfrentar un escenario internacional profundamente transformado, donde la interdependencia económica —incluso en su forma de integración asimétrica— ya no constituye un objetivo político declarado, y donde prevalecen dinámicas de fragmentación, competencia estratégica, repliegues proteccionistas, negación del cambio climático y relativización de los derechos humanos.
Así pues, siendo el objetivo de este Foro el de contribuir a la transformación de México a través de la ciencia, las humanidades y la tecnología, considero que es fundamental impulsar una reforma a la Ley HCTI que restituya el espíritu de lo público a nuestro quehacer, y garantice condiciones estructurales dignas para quienes hacemos investigación en este país. La revisión del programa IxM puede y debe ser la punta de lanza para una política científica con vocación de Estado, que deje atrás la lógica de simulación, precariedad y subordinación administrativa. Es momento de asumir, más allá de los discursos, la centralidad de la ciencia como un bien común y estratégico para el futuro de nuestro país.
REFERENCIAS
Cano, J., Vázquez, C., & Cernichiaro, C. (2024, septiembre 20). ¿Tendrá el presupuesto 2025 el nivel más bajo en ciencia desde 2008? México Evalúa. https://www.mexicoevalua.org/tendra-presupuesto-2025-nivel-mas-bajo-en-ciencia-desde- 2008/
Caro, P. (2024, 9 de agosto). Las remesas de Estados Unidos a México seguirán creciendo este año, pero a un menor ritmo. El País. Recuperado de https://elpais.com/us/migracion/2024-08- 09/las-remesas-de-estados-unidos-a-mexico-seguiran-creciendo-este-ano-pero-a-un-menor- ritmo.html
Dill, D. D., y van Vught, F. A. (Eds.). (2010). National innovation and the academic research enterprise: Public policy in global perspective. Johns Hopkins University Press.
Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural. (2025, 4 de abril). Presenta Gobierno de México plan para aumentar la soberanía y la autosuficiencia alimentaria. Gobierno de México. https://www.gob.mx/agricultura/prensa/presenta-gobierno-de-mexico-plan-para-aumentar-la- soberania-y-la-autosuficiencia-alimentaria?idiom=es
Lagos, A. (2023, 3 de mayo). La comunidad científica califica a la nueva Ley de Ciencia como ‘centralista, regresiva, autoritaria y discriminatoria’. WIRED en Español. Recuperado de https://es.wired.com/articulos/la-comunidad-cientifica-tacha-a-la-ley-de-ciencia-en-mexico- de-centralista-regresiva-autoritaria-y-discriminatoria
Proceso. (2023, 26 de abril). Científicos recriminan aprobación fast track de la nueva ley de ciencias, tecnologías e innovación. Recuperado de https://www.proceso.com.mx/nacional/2023/4/26/cientificos-recriminan-aprobacion-fast- track-de-la-nueva-ley-de-ciencias-tecnologias-innovacion-306064.html
Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación. (s.f.). Ley General en Materia de HCTI. Recuperado de https://secihti.mx/conahcyt/areas-del-conahcyt/unidad-de-asuntos- juridicos/ley-general-hcti/
Vera, Héctor, y González-Ledesma, Miguel Alejandro (2018). “Calidad y evaluación: matrimonio del cielo y el infierno”. Perfiles Educativos, 40 (Especial), 53–97. https://doi.org/10.22201/iisue.24486167e.2018.Especial.59180
UNESCO. (2015, 23 de abril). Science, technology and innovation: Critical means of implementation for sustainable development goals. UNESCO. Recuperado de https://www.unesco.org/en/articles/science-technology-and-innovation-critical-means- implementation-sustainable-development-goals
Zurita, T. (2022). El T-MEC y el sector agroalimentario mexicano. Cámara de Diputados. Recuperado de https://www.diputados.gob.mx/sedia/sia/redipal/CRV-XIII- 22/Ponencia/36%29%20CRV_2022_T3_PONENCIA_Tomas_Zurita_T- MEC_Agroalimentario.pdf

- Con la particularidad de que se ha agregado el rubro “retribución social” como otro elemento a evaluar. ↩︎